Los palatinos
El término “palatino” procede de cuando las familias de la provincia suroccidental alemana del Palatinado se asentaron aquí alrededor de 1710. Las comunidades palatinas también se asentaron en otros puntos de Irlanda, como Rathkeale, en el Condado de Limerick, y Grange, en el Condado de Tipperary.
Un terrateniente local y miembro del Parlamento, Benjamin Burton, que era también el propietario de Burton Hall, trajo a veinte familias que huían de la persecución en su tierra. La puerta de pilares de piedra, su impresionante avenida de una milla de largo y una pequeña ala, que en el pasado cobijó los cuartos de las doncellas, son todo lo que queda hoy.
La hilera de casas situadas en el extremo norte de la localidad se construyó, con toda probabilidad, para dar cobijo a los palatinos a comienzos del siglo XVIII. Además, la Palatine House todavía funciona como bar. La pica grabada sobre la puerta representa la Rebelión irlandesa de 1798.
La atractiva hilera de casas rurales de granito, construidas en cuatro lotes de parejas al sur de la localidad, se planificó para los trabajadores de Burton en 1866. Según narra la leyenda local, las entradas a las casas daban a la parte trasera cuando se construyeron y las puertas hacia la calle se construyeron a posteriori. Se dice también que la finalidad era que los Burton no tuviesen que tratar con sus trabajadores cuando transitaban. No obstante, las entradas frontales y traseras alternas pueden haber tenido finalidades estilísticas.